«Un olor muy desagradable, como a combustión». Es la primera alerta que han lanzado los vecinos que viven más próximos al crematorio de Sant Joan (Alicante). La actividad de la incineradora se inició el pasado mes de julio y sus efectos parece que ya empiezan a notarse entre los residentes. «Es un olor muy suave parecido a la gasolina que deja un sabor dulce en la boca y es muy irritante.
Muchos días me arden los ojos y la garganta», explica María, una sanitaria de profesión de vive cerca del tanatorio. María es asmática y dice que sus síntomas han empeorado en las últimas semanas, por ello ha tenido que pedir cita al neumólogo. «Hasta que no analicen mi caso no puedo decir que mi estado sea a causa de la actividad del crematorio, lo que sí es cierto es que el olor llega a mi casa y que ahora he tenido que incrementar la medicación que tomo», asegura.
María ya ha puesto su caso en manos médicas. Mientras, al Consistorio ya han llegado las primeras denuncias por la existencia de olores, en varios casos por la noche. «Me llamó mucho la atención cuando un sábado volvía por la noche a casa y al pasar por la rotonda del crematorio se metió en el coche un fuerte hedor a gasolina. Igual que el que desprenden las pastillas que se usan para encender el fuego de una chimenea. Fue algo muy desagradable, un tufo tremendo», asegura Isabel, una vecina que ya ha presentado una instancia en el Ayuntamiento.
Isabel preside las comunidades de dos urbanizaciones muy cercanas al tanatorio y asegura que cada vez hay más vecinos que preguntan de dónde sale tal olor. La Plataforma Anticrematorio ya ha recogido estas quejas y como respuesta ha colgado en su web un formulario para que los vecinos registren incidencias como éstas. Además, la asociación decidió en asamblea retomar las movilizaciones a las puertas del tanatorio. «Sabemos por la prensa que la comisión del crematorio está convocada para el próximo día 4 aunque a estas alturas ninguno de nosotros ha recibido notificación por parte del Consistorio», lamentan desde la plataforma.
El Ayuntamiento asegura que ha encargado a Sanidad un informe de emisiones. «Hemos pedido a la conselleria que ratifique si la empresa está dentro de los límites legales establecidos. Además estamos comprobando si las molestias por olores vienen del crematorio o del hospital, tal como nos han comentado algunos vecinos», asegura el portavoz, Santiago Román.